domingo, 5 de diciembre de 2010

Capítulo 100: El miedo a morir. Atoka vs Hatani

Hatani fue impactada contra varios árboles hasta chocar contra una gran roca, provocando grietas en ésta. Sufrió mucho dolor mientras escupía sangre.

:- “¿Qué ha pasado? ¿De dónde… ha sacado tanta potencia?” Ugg…-

Lejos de Hatani, Atoka fue directa a ella con todo su poder, dejando a una Yakuri sorprendida y confusa.

:- “Atoka…”-pensó.

:- ¡HATANIII!-gritó la Hyûga dispuesta a desgarrarla de un golpe, Hatani reaccionó por los pelos y consiguió apartarse, pero sin evitar sufrir cortes laterales. Tras esto perdió el equilibrio pero luego se levantó, con dificultad.

:- ¡La que va a morir serás tú! ¡Bicho monstruoso!-se disponía Atoka a atravesar su mano derecha en el cuerpo de Hatani, pero ésta reaccionó y se apartó a un lado. Sin embargo, sintió cómo fue cogida por la cara con la otra mano de Atoka y fue impactada brutalmente a la roca de antes, llegando a romperla. Ella gritó del dolor mientras rodaba por el suelo sangrando.

:- “Esto es grave… así nunca la venceremos… acabaremos muriendo…”-pensaba mientras intentaba levantarse.

(:- Ússsame-)

:- ¡!-se sorpendió.

(:- Ússsame Hatani… y la venceremosss-)

:- “Tôkaibutsu…”-se quedó un par de segundos sin moverse, pensando:- “Si uso su chakra… podré vencerla… y si lo consigo… no tendríamos que hacer el plan”-continuó levantarse hasta ponerse de pie:- Está bien… ¡Te usaré!-formó entonces el sello para acumular chakra:- ¡Aaaaaaaaaaaaahhhhhh!-

:- ¡Vas a morir Hatani!-se disponía Atoka a atacarla de nuevo pero Hatani obtuvo sus rasgos del Tôkaibutsu y se lanzó hacia ella.

Entonces las dos comenzaron a dar una serie de potentes golpes una contra la otra, mientras se esquivaban o se protegían. Llegó un momento en el que Hatani superaba a Atoka y ésta empezó a sufrir los golpes. Tras desahogarse con bastantes de ellos, Atoka fue lanzada a dos metros de distancia mientras Hatani gritaba. Había perdido el control, pero no todo. Atoka escupió sangre e intentó levantarse, pero le costaba, mientras Hatani se acercaba lentamente.

:- No… no aceptaré esto…-susurraba en voz baja mirando al “bicho monstruoso” con furia.
:- Je-sonrió Hatani mostrando superioridad, subestimando a su rival.
:- Tsk. ¡No lo aceptaré!-

Aumentó más su poder lanzándose hacia Hatani, ésta (o el que la controla) se sorprendió y no reaccionó a tiempo. Recibió apuñaladas por parte de las afiladas uñas de Atoka en su espalda, mientras ésta estaba delante, como si fuera un abrazo.

:- Ugg… ¡Aaaaaahhhhhhhhhhh!-gritó Hatani aún descontrolada.
:- Ya no sonríes ¿eh?-susurró la Hyûga:- ¡Maldita escoria!-dicho esto apartó sus uñas hacia los lados provocando graves desgarres. Hatani gritó más fuerte volviendo en sí, perdiendo el equilibrio y viendo cómo Atoka formaba sellos:- ¡Jutsu Blando! ¡112 Puntos Hakes Intensivos!-

:- “¡¿Pero qué…?! ¡¿El chakra del Tôkaibutsu no ha funcionado?!”-pensaba Hatani sorprendida mientras perdía el equilibrio. Pero no llegó a caerse, pues empezó a recibir los 112 puntos hakes, quitándole todo el chakra que tenía, aparte de recibir intensos dolores.

Tras terminar la técnica, Atoka cogió a Hatani por los pelos con la mano izquierda mientras agarraba el brazo izquierdo con su mano derecha, y la apoyó fuertemente en un árbol, sin llegar a romperlo. Hatani gritó y escupió más sangre, estaba al límite.

:- Maldito Bicho monstruoso…-decía Atoka rabiosa:- La única que va a morir aquí… ¡Eres tú!-haló fuertemente de los pelos haciendo que Hatani gritara más.

:- “No puedo moverme… no tengo suficiente chakra… incluso me ha bloqueado el del Tôkaibutsu… no puedo hacer nada…”-pensaba mientras cerraba los ojos para aguantar el dolor.

:- Te odio Hatani… Te odio con todas mis fuerzas…-susurraba:- Por todo lo que has provocado con tu existencia… ¡¿Acaso pensabas que te iba a servir como una esclava?! ¡¿EH?!-halaba más fuerte.
:- ¡Aaaahh!-
:- Por tu culpa has hecho que esa Yumi nos traicionara… y por ello Yamika se cansó de mí…-
:- ¿? Ugg-
:- ¡Todos los de la rama principal sois iguales! ¡Haciendo que los que os sirven hagan lo que sea por alejarse de ustedes! ¡Incluso rompen sus lazos si es necesario!-
:- ¡Aaahh!-
:- Quiero divertirme… sí…-decía maléficamente mientras observaba con atención el cuello de Hatani:- Tengo muchas ganas… de desgarrarte tu cuello-

:- ¡! “¡Mierda! ¡Aunque quiera no puedo moverme!”-intentaba resistirse pero no podía.

:- Vas a sufrir hasta el último momento…-le susurraba acercando sus labios al oído:- … bicho monstruoso-tras esto acercó sus dientes al cuello de Hatani haciendo que ésta notara su aliento. Esto hizo que Hatani se desesperara e intentara inútilmente moverse para resistirse. Sin embargo, un par de segundos después, Atoka la mordió fuertemente mientras desplazaba sus dientes clavados hacia la izquierda con lentitud. Hatani gritó con todas sus fuerzas.

:- ¡AAAAAHHHH! ¡BASTAAA! ¡PARAAA! ¡AAAHH!-

:- “Je, sí… pide clemencia… bicho monstruoso… aunque eso no te sirva de nada”-pensaba Atoka sonriendo.

:- “Esto es el fin… ni siquiera he podido vencerla con el Tôkaibutsu… lo siento Yakuri… todos”-pensaba Hatani mientras seguía gritando del dolor.

Mientras tanto, unos sellos se formaron rápidamente…

Atoka se percató de que algo venía hacia su lado derecho, por ello dejó de desgarrar a Hatani y se apartó dos metros. Eran varios pinchos de tierra que pasaban en medio de las dos, mientras Hatani se quedaba de pie apoyada en el árbol, sin moverse, sufriendo.

De repente apareció Yakuri delante de Hatani, golpeándola fuertemente en el estómago.

:- Yamika…-se sorprendió Atoka.

:- Ugg…-escupió Hatani sangre sintiendo cómo el árbol de atrás se agrietaba.
:- Hatani…-susurraba Yakuri al oído:- Confío en ti… el kunai todavía contiene chakra-
:- ¡!-tras sorprenderse, la rubia terminó su golpe, rompiendo el árbol de atrás lanzando a Hatani lejos de allí.

:- Atoka…-se giró Yakuri para mirar a la Hyûga triste y acercarse a ella, hasta llegar a abrazarla.
:- ¡!-la Hyûga se sorprendió ante tal acción.
:- Ya es suficiente… pronto vendrán refuerzos de Konoha…-continuó abrazándola pero alejó un poco su cara para mirarse a los ojos:- Larguémonos Atoka… juntas-
:- ¿Lo… lo dices en s… serio?-tartamudeaba sorprendida.
:- Sí… vayamos a un lugar mejor… Atoka… olvidémonos del mundo ninja-empezaron a caerle un par de lágrimas:- Juntas… nos iremos lejos de aquí-
:-Ya… Yamika…-sonrió Atoka completando el abrazo.
:- Snf… lo siento…-decía en voz baja mientras miraba al suelo:-… Atoka-
:- ¿Eh?-

Entonces las dos sintieron algo atravesando sus cuerpos. Era una gran lanza puntiaguda de chakra que provenía del kunai de Yakuri, del cual estaba sujetada por Hatani, quien se encontraba detrás de la rubia a medio metro de distancia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario