Capítulo 85: El punto débil de Hatani. Aparecen sus compañeros

:- ¡Atoka!-se sorprendió Hatani, dejando de correr. Los rasgos del Tôkaibutsu habían desaparecido tras el ataque, al igual que el Sharingan.

:- “¿Esa es… Atoka?”-pensaba Yakuri quien se encontraba lejos de esa escena.

:- No creas que te dejaré escapar ahora, bicho monstruoso. Ja, ja, ja. Acabaré contigo antes de que el señor Orochimaru venga a por ti-

:- “Mierda… ¿ahora tengo que pelear con ella? No quiero perder el control otra vez con el Tôkaibutsu para vencerla como la última vez… pero…”-

De repente Atoka apareció delante de Hatani para golpearla al estilo Hyûga, ésta reaccionó a tiempo y desvió el ataque.
:- Siento interrumpir tus pensamientos…je-sonreía:- Pero es hora… ¡De acabar contigo de una vez!-dicho esto hizo el giro celestial lanzando a Hatani a dos metros e impactarla contra el suelo:- Je, sé que gastaste la mitad de tu chakra en esa rara técnica que usaste antes…-se acercaba caminando:- … ¡pero aún así, sé que puedes seguir luchando!-

Atoka se disponía a dar una patada al estómago de Hatani, quien seguía en el suelo, pero ella la paró con una mano y haló un poco para que Atoka perdiera el equilibrio. Hatani aprovechó para levantarse rápidamente y realizar una técnica.
:- ¡64 puntos hake!-
:- Tsk… ¡Giro celestial!-

El giro celestial fue más rápido y más fuerte que los puntos hake de Hatani, por ello, fue lanzada bruscamente. En el aire, Atoka apareció detrás de ella pero en el lado derecho.

:- “¿Dónde está? ¡No la veo con mi Byakugan! ¡Espera…!”-adivinó el lugar donde estaba, pero era tarde, ya que sintió un potente golpe Hyûga en su espalda. Hatani gritó del dolor impactándose fuertemente en el suelo, creando un gran humo.

:- ¡JÁ! ¿Creías que no me había dado cuenta de tu punto débil?-sonreía Atoka cayendo de pie a una distancia de dos metros de Hatani:- Tu visión con el Byakugan es sólo de 180º, no puedes ver lo que hay detrás de tu parte derecha del cuerpo. Eso demuestra que ¡No! eres una verdadera Hyûga. ¡Ja, ja, ja!-
:- Tsk…mierda…ugg-se levantaba Hatani aguantando el dolor:- “Es más fuerte que la otra vez… o yo estoy más débil”-

:- ¡Esta vez acabaré contigo antes de que uses a ese monstruo!-corrió hacia ella mientras preparaba sus manos para un gran golpe, pero de repente apareció un dragón de agua lazándose hacia ella. Atoka se apartó saltando hacia atrás y, aprovechando que Hatani no la veía por estar el dragón delante (desapareciendo), lanzó su kunai.

Hatani se percató cuando apenas el kunai estaba a punto de atravesar su cara, pero fue desviada por otro kunai, los dos rebotaron hacia arriba y el que acababa de aparecer fue cogido por alguien quien dio un salto y se colocó al lado izquierdo de Hatani.

:- ¡A… Akor!- se sorprendió, entonces sintió que alguien se colocaba a su lado derecho y miró hacia allí:- ¡R… Roy!-

:-Vaya…volvemos a vernos Akor-sonrió Atoka:- Veo que tus heridas ya se han curado, je, je-

Akor la miró con desprecio, Hatani se percató de que algo había pasado entre ellos y miró a Akor preocupada.
:- ¿Qué ha pasado Akor? ¿Qué te ha hecho Atoka?-
:- Nada-decía sin mirarla.
:- ¿Y esas heridas? ¿No me digas que…?-

:- Estoy bien-entonces la miró:- No te preocupes-Hatani se sorprendió al ver la mirada del pelirrojo, mostraba seguridad… pero lo que más le sorprendía era que también mostraba una pequeña alegría… apenas se notaba, pero ella lo notó.

:- ¡Exacto bicho monstruoso!- interrumpió Atoka:- ¡Yo fui quien le hizo esas heridas! Ja, ja, ja. ¡Me divertía mucho torturándole en la sala de interrogatorios de Konoha mientras tú te fuiste a buscar a tu maestro!-
:- ¿Qué? ¿Sala de…?-
:- ¡¿Acaso creías que Akor se te había adelantado?! Ja, ja. ¡No debiste fiarte del jounin que te guió!-

Akor volvió a mirar a Atoka con desprecio, entonces apareció delante de ella atacando con su kunai, ella sacó otro y bloqueó el ataque.
:- Ya es suficiente. Cierra la boca-le decía molesto.
:- Je, ni a hablar… Hatani tiene que saber…-desvió el bloqueo bruscamente:- ¡Lo despreciable que es!-dicho esto le dio una patada a Akor lanzándolo fuertemente desde donde vino. Hatani se puso detrás de él para sujetarlo antes de que se impactara contra el suelo.
:- ¡Akor! ¡¿Estás bien?!-

:- Sí…-decía mientras se recuperaba y volvía a ponerse a su lado.

:- Sé que no “pinto” nada sobre lo que acaba de pasar pero…- sonreía Roy mirando a Atoka:- Me acabas de dar otro motivo para acabar contigo, je, je-

:- ¡Ja, ja, ja, ja! ¡Bien! ¡Pongamos esto más interesante! –Atoka sacó un rollo extraño:- ¡¿Por qué no continuamos lo que dejamos la última vez?!-dicho esto lo abrió haciendo que apareciesen dos personas.

:- No puede ser… pero si estaban encerrados en Konoha-se sorprendía Akor mirando a Yakio al lado derecho de Atoka.

:- ¡Yajajajaja! ¡Cuánto tiempo Akor!-decía Yakio sacando la lengua.

:- ¿Otra vez tú? Qué mierda… ¿Tengo que volver a pelear con este gigante?-se burlaba Roy viendo a Shunko al lado izquierdo de Atoka.

:- Esta vez disfrutaré de tu sufrimiento, je, je-
:- Je, no creas que volverás a atraparme.-

:- “Esto no me gusta… tengo un mal presentimiento”-se preocupaba Hatani. 

:- ¡Ja, ja, ja! ¡Bien! ¡Veamos quién es más fuerte! ¡¿El equipo que se deja llevar por sus estúpidos sentimientos… o el equipo que carece de compasión y disfruta torturando a los demás?!-finalizaba Atoka sonriendo malvadamente antes de comenzar a luchar. 

:- “Veo que no hay más remedio… está bien Atoka… te venceré… ¡por todo lo que has hecho! ¡Y por lo que le hiciste a Akor!” pensaba Hatani mirando furiosa a Atoka, decidida a luchar al igual que sus compañeros.