Capítulo 97: La rotura de la técnica irrompible

Tras gritar, Hatani apretaba fuertemente sus dientes mientras resistía el dolor de los cortes ardientes.

:- “Tengo que salir de aquí cuanto antes… No puedo dejar que Atoka gane…”-pensaba mientras se levantaba lentamente.

Se apretó el lugar de su corazón, le dolía bastante.

Volvieron a aparecer los cortes hacia el cuerpo de Hatani, ella perdió el equilibrio volviendo a gritar del dolor. Esta escena se repetía constantemente.

:- ¡HATANI! ¡AGUANTA!-
:- ¡Ja, ja, ja, ja!-reía descaradamente Atoka.
:- Tsk. ¡Atoka! ¡Quita esa técnica ahora mismo!-
:- Ja, ja ¿pero qué estás diciendo?¡Si lo estabas deseando! ¿O ya no te acuerdas?-
:- ¡He dicho que la dejes!-

Atoka sufrió un corte en el abdomen, dejó de reírse y miró su herida, luego miró a Yakuri seria.

:- No voy a permitir… que Hatani rompa nuestra amistad… Pase lo que pase…tú y yo seremos amigas para siempre… hasta la muerte-
:- A… Atok…-dijo sorprendida, pero fue interrumpida por la Hyûga, ya que ésta apareció detrás de ella agarrándola con la vista en Hatani.
:- ¡Observa! ¿La ves? Es el bicho monstruoso, la causa de nuestra separación hace cuatro años… incluso la causa de la muerte de Yumi-
:- ¡!-miraba paralizada.
:- Si ella no hubiera nacido, nosotras seguiríamos siendo inseparables y felices siendo las reinas del barrio. Incluso Yumi estaría viva-susurraba.
:- … Yumi…-
:- Sí… murió por culpa de ese bicho monstruoso… pero no te preocupes… yo no estoy muerta… no estás sola… Yamika… yo estoy aquí… como siempre…-
:- …-
:- Y siempre lo estaré… hasta la muerte… tú y yo estaremos juntas… tal y como nos prometimos…-
:-…-

Mientras, Hatani apenas podía moverse, estaba acostada boca abajo, sangrando y sufriendo.

:- “Duele… duele mucho… no puedo moverme… me duele…”-pensaba con rabia, tanta rabia que de sus ojos le empezaron a salir lágrimas:- “¿Por qué no puedo con ella? Snf… ¿Por qué… me odia tanto? ¿Por qué… soy un bicho monstruoso?”-

:- Puedessss vencerla-

:- ¡!-se sorprendió.

:- Lo esssstássss dessseando-
:- Tôkaibutsu… no creas que picaré otra vez…-
:- No aguantarássss tanto dolor, pronto explotarássss. Lo ssssé-
:- Tsk… no… no quiero descontrolarme…-
:- Afuera no essstán tus compañerossss… puedessss desssahogarte-

:- ¡No! ¡Está Yakuri! ¡Deja de intentar convencerme! ¡No lo lograrás! ¡Déjame en paz! Uggg-empezó a sentir más dolor. El Tôkaibutsu dejó de hablar. Tras unos minutos de silencio, Hatani intentó levantarse, pero le costaba bastante. Cada movimiento que hacía sentía un intenso dolor, tanto ardiente como en el corazón.

Consiguió ponerse en pie, pero no estaba erguida, le costaba respirar.

:- Voy a acabar con esto… ¡Ahora! ¡Byakugan! ¡Sharingan!-activó sus dos ojos mientras sacaba un kunai.

Se percató de la presencia acercándose a ella por detrás, por lo que intentó darse la vuelta para bloquearlo, pero los dolores la hicieron perder el equilibrio. Sintió el corte y cayó boca abajo. Intentó levantarse pero no podía. Entonces sus ojos se percataron de varias presencias juntas hacia ella.

:- “¡No puedo moverme! ¡No podré esquivarlos! ¡Mierda!”-

Entonces todo el cuerpo de Hatani empezó a sufrir cortes sin cesar, cada una con un intenso dolor ardiente al rojo vivo. Hatani cerraba los ojos para aguantar, pues no quería llenarse de rabia y ser controlada por el Tôkaibutsu.

:- “Mantén la cordura… mantén la cordura…”-pensaba mientras aguantaba los cortes que sufría.

:- Atoka-dijo el Tôkaibutsu de repente, haciendo que Hatani se sorprendiera:- ¿Vasss a dejar que ssse sssalga con la sssuya?-

Hatani centró todo su pensamiento en Atoka, sus recuerdos, cómo se metía con ella, cómo odiaba a Yumi, lo que le hizo a Akor, lo que sucedió durante la invasión de Orochimaru, etc. Toda su rabia estaba aumentando.

:- ¿Vasss a dejar que Atoka te mate? ¿Dejarásss que sssiga haciendo sssufrir a losss que te rodean?-
:- Atoka…-decía conteniéndose.
:- ¡SSSiente todo el dolor que essstásss sssufriendo ahora por sssu culpa! ¡Sssiéntelo!-

Hatani miraba fijamente al frente, apretando sus dientes, apretando sus dedos en el suelo, respirando costosamente, mientras seguía sufriendo los cortes sin cesar.

:- ¡No puedessss contener tanto dolor! ¡Essss demasssiado!-
:- Grrrrr-rugió un poco en voz baja. El Sharingan desapareció, apareciendo el color amarillo del chakra en sus ojos.
:- Essstásss harta de tanto dolor ¿verdad?-
:- Grrrr-subió un poco el tono. Estaba a punto de estallar.
:- Entoncessss…. ¡SSUÉLTALO!-
:-GGGGRRRRRAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA-

Un intenso chakra amarillo explotó desde dentro creando grandes ondas expansivas rompiendo el fondo negro de alrededor. Desde el exterior se podía apreciar lo mismo, Hatani gritando con gran odio mientras se expandía su gran chakra.

:- ¿Pero qué diablos…? ¡Es imposible! ¡Esta técnica es irrompible!-se sorprendía Atoka, al igual que Yakuri.

Todo el fondo negro se rompió en mil pedazos mientras se desintegraba. El cuerpo de Hatani se levantó lentamente a la vez que sus heridas se curaban con rapidez, provocando mucho humo a su alrededor.

:- GGGGRRRRRAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA-

El chakra hizo que todo su alrededor saliera disparado de ahí, incluido Yakuri y Atoka, las dos se alejaron separándose una de otra. Hasta que finalmente, Hatani dejó de gritar y el chakra desapareció, haciendo que ella perdiera el equilibrio y se quedara de rodillas y apoyando sus manos en el suelo, tosiendo y recuperando el aliento. Su cuerpo temblaba.